Un país tercermundista es un país o nación, que se caracteriza por un nivel de desarrollo económico y social insuficiente, para satisfacer todas las necesidades y requerimientos de su población.
Un país tercermundista hace referencia a una gestión de distribución desigual, de sus recursos naturales y financieros. Es decir, concentra la riqueza en un número muy reducido de sus pobladores, en detrimento de las grandes mayorías.
Es importante destacar que, cuando analizamos el término país tercermundista, englobamos a naciones en vías de desarrollo o subdesarrollados.
Esto supone, principalmente, países con niveles de ingresos por debajo del monto mínimo requerido, para satisfacer sus necesidades básicas.
Un país tercermundista presenta altos niveles de pobreza de toda su población, con carencia de servicios básicos y de asistencia de salud idóneos, para los estratos más vulnerables.
Características de un país tercermundista
Los países tercermundistas presentan las siguientes particularidades, que los diferencian de las naciones desarrolladas:
- Bajos niveles de ingresos: en este tipo de país se presenta unas remuneraciones, tabuladores de sueldos e ingresos de sus pobladores, muy por debajo del costo de la canasta básica de bienes y servicios.
- Carencia e ineficiencia en los servicios básicos: la mayoría de los ciudadanos presentan carencias y fallas constantes en el suministro de agua potable, electricidad, teléfono y sistemas de correos, entre otros.
- Obsolescencia productiva y tecnológica: los modos de producción y logística empresarial, presentan desfase y atraso con respecto a tecnología de punta. Igualmente, los servicios de internet presentan muchas carencias y son los más lentos de la región.
- Altos niveles de corrupción y pocos controles gubernamentales: en este tipo de países se presentan con mucha frecuencia desviaciones de partidas presupuestarias, sobre facturación en las compras de bienes y servicios y manejo inadecuado de recursos financieros.
- Indicadores bajos de calidad de vida: gran porcentaje de la población presenta sistemas precarios de viviendas, baja escolaridad y estados de salud muy frágiles.
- Frecuentes desplazamientos y migraciones de sus pobladores hacia otros territorios, en búsqueda de mejores expectativas de calidad de vida.
Economía de un país tercermundista
Un país tercermundista presenta altos niveles de endeudamiento con organismos de financiamiento internacional, para paliar en cierto modo insuficiencias presupuestarias. Dependen generalmente de la tecnología, bienes y productos, traídos del exterior.
Su balanza de pagos es negativa porque, es más las cantidades que importan que lo que produzcan. Se les denomina países con economía de puerto y no tienen, en cierto modo, capacidad para producir lo que el país necesita en bienes y servicios.
Precisamente, el valor real de los bienes y servicios producidos (PIB) es mínimo o negativo. Tienen altos niveles de inflación, con aumentos periódicos del índice de precios al consumidor de los productos.
Otro comportamiento muy frecuente de la economía de los países tercermundistas es las altas tasas de desempleo que presentan los ciudadanos, con mayor tendencia hacia sectores de economía informal.
